Este perfume lanzado el 2008 corresponde a una edición de Halloween, el cual en particular no corresponde a una reinterpretación o variación del original ya que sigue un estilo completamente diferente sin repetir notas con respecto a su antecesor... el enfoque que se da en esta ocasión de acuerdo al sitio de Perfumes y Diseño (quienes fabrican el perfume para Jesús del Pozo) evoca ambiente urbanos nocturnos adolescentes con ruido y música, cargados al neón con inspiración en Tokio y Shangai, donde lo oriental se recuerda por la imagen de una orquídea japonesa estampada en el frasco del perfume. En el mismo sitio declaran que las notas principales son: naranjas, frutas rojas, pera, durazno, orquídea, vainilla y lo que denominan "bombón". Como curiosidad la referencia a "bombón" puede venir de la denominación genérica de un caramelo canadiense que se reparte a los niños en fiestas de Halloween y al que se le dice "Halloween Kiss". En partida se siente cargado a las frutas, principalmente frutos rojos frescos y dulces bien balanceados en la línea de los berries más que las frambuesas y las sandías, sin caer en lo adolescente. Presenta otras frutas junto a los rojos, algo neutros como duraznos y con presencia de una flor fresca que puede ser una rosa acuática. En notas medias los frutos rojos tienden a la baja, predominando un nuevo frutoso neutro cargado a la vainilla y algunos florales frescos y suaves no muy definidos pero que se mantienen en segundo plano. Con el tiempo los florales tomas más presencia sin que la fragancia se vuelva completamente floral debido a unos residuos de frutos rojos, sintiéndose las flores en tonos similares a rosas blancas. El perfume tiene una buena partida usando frutos rojos pero se maneja en un perfil relativamente bajo, con tendencia al uso diario u oficina atemporal. El bajo perfil no lo hace muy llamativo de noche como fragancia especial... se siente más como una aroma que acompaña de inicio a fin del día sin que esté hecho para llamar la atención. Lo mismo ocurre para el uso romántico, donde tiene unas notas dulces pero que no son lo bastante llamativas para optar por esta fragancia para una situación especial.
